viernes, 18 de abril de 2014

La felicidad no es eterna, y tu recuerdo quema.

Ella dejó de sonreír hace un tiempo, cuando su recuerdo cobró vida, aquella herida que pensaba que había cicatrizado volvió a aparecer en su vida. Había hecho de todo para dejarla atrás, para superarlo y que quedara en el pasado y poder seguir adelante con su vida. Pero no todo es tan fácil, ¿cómo algo que has querido tanto puede hacerte un daño de valor incalculable? Fue feliz, como nunca lo había sido, pero ahora, ¿qué le queda ahora? Lo ha perdido, o tal vez él decidió marcharse, eso da igual, ya no está con ella. Y sí, fueron felices, pero la felicidad no es eterna, siempre hay algo que cambia el final, que hace que la historia no sea como quisimos imaginarla desde un principio. Así son los recuerdos, te van matando poco a poco por dentro, hasta acabar con todo, y dejarte totalmente vacía. Y ahí permanecerá por siempre, tratando de sonreír, anhelando todo lo que tuvo algún día, aunque no tenga motivos para hacerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario