viernes, 4 de abril de 2014

La vida es una hija de puta.

Deja de querer controlarlo todo, de hacer cualquier cosa para no sufrir, por que la vida es así, una hija de puta, que te hace los días difíciles, no te deja respirar ni un segundo, invitándote a luchar por quienes te importan y obligándote a que no te rindas. Tal vez, si estuvieras aquí, a mí lado, no sé, todo sería más fácil, no derramaría tantas lágrimas por cosas estúpidas, pero sé que ya no estarás, te fuiste, y yo fui demasiado cobarde, o estaba demasiado débil como para impedirlo.

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