domingo, 9 de noviembre de 2014

Besándonos hasta desgastarnos los labios.


El café se enfría,
y los besos se vuelven amargos,
las caricias ya no son las mismas,
ya no existen los abrazos
a altas horas de la noche.
Que dejamos de llamarnos
cada día,
empezamos a alejarnos,
aunque yo te necesitara
cada vez más,
poco a poco sentía
que te perdía.

Y espero despertar
y volver a verte a mi lado,
pasarnos el día entero en la cama,
besándonos hasta desgastarnos los labios,
hasta que el mundo
vuelva a tenernos envidia,
y la tristeza desaparezca de nuevo.

'Lo prometo',
fue lo último que te escuché decir,
aquello que repetías constantemente
y que yo como una tonta
no dejaba de creerme.
Ahora tan sólo te pido
que vuelvas,
por mí,
por ti,
por los dos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario